La mujer de hoy en día a pasado por muchos años de evolución; tanto en la forma de pensar, el cómo enfrentarse a la dura crítica social, la lucha en contra de la discriminación y sus derechos, en su actitud y por supuesto su vestuario, entre otros muchos cambios más.
En muchas maneras estos cambios han generado un nuevo beneficio para la mujer actual, y es que el patrón que por siglos se concibió acerca de la mujer, ahora se podría clasificar como impredecible; son capaces de transformarse totalmente solo para una entrevista de trabajo, en la sociedad de hoy es cuando se puede observar un contraste más evidente entre las mujeres que toman en cuenta su apariencia para representar un rol, como ejemplo: la mujer en el mundo empresarial.
Cuando las mujeres impusieron su presencia en el mundo de las empresas, mundo que anteriormente solo consideraba que los hombres eran los únicos aptos para este tipo de trabajos, se vieron invadidos de repente por la madurez y la lluvia de ideas ascendentes de mujeres con iniciativa y completamente capaces para desempeñar el rol masculino en el trabajo ejecutivo, sin dejar de ser mujeres. A medida que esto causó controversia y discriminación, las mujeres fueron mucho más allá de la barrera de la intimidación y se prepararon más, lucharon por ganarse un ascenso por meritos propios y lo que es más admirable, crear sus propias empresas.
En abril pasado, cnn en español comentó acerca de una investigación que realizaron Tilia Wong y Charles O'Reilly a 132 graduados de la Facultad de Negocios de la Universidad de Stanford (USA) cuyo grupo está conformado mayormente por mujeres, la investigación tuvo como fin evaluar cuan femenino o masculino era el comportamiento laboral de estas mujeres basándose en las actitudes estereotipadas que comprenden a la masculinidad (agresividad, actitud enérgica y confianza) y feminidad (compasión, sumisión y sensibilidad). Esto tuvo como resultado:
“aunque una mujer masculina es vista como más competente que una mujer femenina, también son vistas con menos habilidades sociales y por consecuencia, menos deseables o menos propensas a recibir un ascenso”.
Cnn en español
Sin embargo, las mujeres han aprendido a persuadir la actitud machista con la moda, psicológicamente se ha comprobado con una investigación reciente por la Dra. Olivia O'Neill para el Diario de Psicología Ocupacional y Organizacional, que si la mujer adopta ocasionalmente actitudes asociadas a los hombres, esto puede persuadir el pensamiento machista y recrear en la mente masculina como si la mujer fuera exactamente igual a un hombre y así exterminar la discriminación en momentos y situaciones importantes, como lo es un ascenso.
En este proceso el vestuario y apariencia en general de una mujer es primordial para lograr el objetivo, actualmente muchos diseñadores han lanzado discretamente líneas ejecutivas de ropa, todo un reto para el juego psicológico que el mundo empresarial exige, pero al mismo tiempo, es una innovación que favorece al proceso de incursión que ha venido formando la mujer a nivel mundial. Ejemplo de ello es la diseñadora y precursora de la llamada “industria femenina” Carolina Herrera, que bajo su sello personal siempre tiene en cuenta a la mujer ejecutiva como inspiración para sus creaciones, retomando la falda recta a la rodilla en su colección 2011, tanto en verano y otoño.
Por otra parte el diseñador revelación 2008, Jason Wu ha retomado el look ejecutivo con tendencias retro en su colección 2011; teniendo como protagonista el pantalón, ya sea con cintura alta o a la cadera el pantalón ha sido desde la antigüedad un ícono masculino pero, en la actualidad es la mejor arma para la persuasión mental e igualdad de sexos en el ambiente laboral. Jason wu es uno de los favoritos en la moda política, desde que la primera dama de Estados Unidos, Michelle Obama comenzó a usar varios de sus diseños. Otro diseñador que ha incluido en su colección piezas para mujeres ejecutivas, es Narciso Rodríguez, ha demostrado su versatilidad para vestir a personalidades del mundo político-empresarial, ya que en este mundo de los negocios la carta de credibilidad es el look completo.
Desde siempre la moda y la mujer han ido de la mano, no solo la moda, sino también los retos. Es por esto es que una simple prenda de vestir como un pantalón, tiene tanto significado a nivel psicológico dentro del rubro empresarial y ejecutivo, las mujeres no se han rendido ante los prejuicios masculinos, al contrario, han sabido luchar con sabiduría y persuadir decisiones a su favor.
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